La medicina de plantas, como la ayahuasca, no solo conecta cuerpo y mente, sino que nos permite salir de nosotros mismos para ver nuestra vida desde una perspectiva más amplia, como una pieza en un patrón más grande que abarca toda nuestra historia.
Visiones: Estas medicinas inducen visiones profundas que revelan verdades ocultas, provocan emociones y nos guían a través de reinos desconocidos, más allá de la experiencia consciente.
Arquetipos: Los arquetipos, formas universales presentes en mitologías de diferentes culturas, emergen durante estas visiones, desafiando la comprensión de la psique humana, tal como lo describió Carl Jung.
Purga: La purga, un proceso de liberación energética, no solo limpia el cuerpo, sino que también permite enfrentar traumas emocionales, promoviendo una sanación profunda.
Proceso: Este camino requiere valentía, paciencia y una disposición para enfrentar lo más oscuro de uno mismo, un proceso continuo de autodescubrimiento que nos desafía a sanar, no solo a enmascarar.
La medicina de plantas invita a un viaje profundo hacia el conocimiento personal y el entendimiento del universo. ¿Estás listo para emprender este viaje de transformación?
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